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El futuro de la Telemedicina

Aprovechar el potencial de las tecnologías digitales para el diagnóstico, tratamiento y prevención de enfermedades tiene grandes ventajas. ¿Pero estamos listos para adaptarnos a esta forma de atención médica?

[vc_row][vc_column][vc_column_text]La pandemia de COVID-19 destacó la importancia y la utilidad de la telemedicina como una manera de poner en contacto a pacientes y profesionales de la salud cuando una consulta en persona no era, quizás, la mejor idea.

Se trata también de una manera de aprovechar el potencial de las tecnologías digitales para un intercambio de información que permitiera el diagnóstico, el tratamiento y la prevención de enfermedades, entre otras cosas, con el objetivo final de mejorar la salud de la población y de las comunidades.

Y si bien todes somos capaces de reconocer que el progreso de las tecnologías aplicadas a la salud fueron y son fundamentales, ¿estamos listos para adaptarnos a esta no nueva pero si recientemente masificada forma de atención médica? ¿Llegó la telemedicina para quedarse y hacerse lugar a la par de la tradicional atención presencial? Reflexiona sobre esto Flavio Sánchez, médico de la UBA, fundador de la empresa de telemedicina Telerad y especialista en el diagnóstico de imágenes a distancia.

Flavio Sanchez desde joven siempre se apasionó por la tecnología y después de estar más de 16 años como Jefe de servicios en FLENI fundó su propia empresa de telemedicina, Telerad. Conformada por especialistas en diagnóstico por imágenes, trabaja para lograr una óptima calidad de informes y dispone de tres unidades de negocio: Teleradiología, donde brinda servicios de análisis y reportes de estudios de imágenes a distancia para establecimientos médicos; Teleducación, donde brinda una plataforma de capacitación a distancia abierta, flexible e interactiva; y Telegestión, donde asesora sobre mejores prácticas médicas en diagnóstico por imágenes a centros de salud.

A pesar de ser médico y de venir de otro “palo” como es la medicina, emprendió esta empresa con sus ahorros para que más personas puedan acceder a la salud sin límites ni fronteras utilizando todos los recursos tecnológicos disponibles.

Sobre estos comienzos, destaca: “Muchas ideas se me ocurren en momentos que no son de inspiración. A partir de esa idea me senté, empecé a planificarla y a la primera que le presenté la idea es a mi familia: a mi esposa, que es mi socia, Sandra; y después a mis hijos. La idea era recibir estudios de imágenes en un servidor, en una plataforma. En ese momento las analizaba yo porque era el único médico y emitía un informe, un reporte”.

Ahora, habiendo crecido tras más de diez años de esfuerzo, desde allí proveen de conocimiento “a los centros de salud y hospitales de la Argentina que a pesar de tener un tomógrafo o los equipos de imágenes no pueden entender los estudios y necesitan médicos especializados”. Entonces, tecnología mediante, se puede ayudar a dar tratamiento a distancia.

La especialidad quizá no es la más popular, pero incluye todas las modalidades de imágenes para el diagnóstico; a saber: radiografías, mamografías, ecografías, tomografías y resonancias.

Y su camino profesional no se limitó solo a los hospitales o centros de salud, sino que también se extendió hacia las aulas. Sanchez es además profesor titular en la UBA y fundó una plataforma online con cursos especializados gratuitos donde se forman y especializan todos los médicos de la región.

 

Con toda esta experiencia encima y en medio de un contexto que nos llevó a adoptar la telemedicina con mayor frecuencia y buenos ojos, el médico destaca como ahora, en contraste a la resistencia de antes, los pacientes prefieren hacer las consultas online para no dirigirse a una clínica o consultorio y no contagiarse. “Fue un cambio radical que obviamente llegó para quedarse”, sostiene.

“En el caso nuestro vemos una mayor aceptación a esta metodología o a esta rama de la telemedicina; porque la teleradiología es una rama de la telemedicina, quizás la más desarrollada en el sentido de que está muy ligada a la tecnología”.

En este sentido, destaca algunos hitos importantes que dieron lugar a tal desarrollo: cuando las imágenes analógicas se convirtieron en imágenes digitales y cuando internet amplió sus capacidades, permitiendo que se puedan transmitir imágenes a distancia sin problemas.

“La especialidad nuestra es una especialidad que está ligada mucho a la tecnología por esto y además por el desarrollo de los equipamientos, los tomógrafos y los resonadores… El otro factor de desarrollo importante es que la medicina en general depende bastante de las imágenes”, enfatiza.

“Para darte un ejemplo concreto, un paciente con un accidente cerebrovascular necesita una imagen si o si; por más de que se le haga el examen clínico, el laboratorio necesita una imagen de una tomografía o una resonancia para confirmar que realmente tiene un accidente cerebrovascular”.

“Entonces las imágenes han tomado un auge y una importancia en la medicina”, destaca.

Sanchez considera que hay un cambio de paradigma en la parte médica —pero en otras como el trabajo a distancia también— que a sus ojos, es más aceptada y va a tener otras aplicaciones.

“De hecho, ya empezaron otras aplicaciones de la telemedicina”, continúa. “Si bien antes era la consulta solamente, ahora se hacen además consultas psicológicas online, la telecardiología [el análisis de un cardiograma a distancia] se desarrolló mucho… Hay una infinidad de aplicaciones [en la telemedicina] que yo creo que van a desarrollarse mucho más”.

“Con esto no quiero decir que estoy en contra de lo presencial, para nada. Yo creo que lo presencial es muy importante. Pero si [la telemedicina] llegó para quedarse y mucho más”, concluye.

Llegó para quedarse, tal vez, por la gran cantidad de ventajas que presenta. En lo educacional, que no existen las barreras para aprender. “Yo aprendí con libros, con papel. No existía la tecnología de internet como ahora para poder buscar cualquier paper, la última publicación, y esa fue mi forma de aprender. Ahora es al revés. La mayor parte del consumo de la información médica es a través de internet, a través de revistas, archivos, pdfs… Eso cambió radicalmente”, reflexiona el médico y docente.

“Creo que las principales ventajas a la vista es que nosotros, por ejemplo, desarrollamos webinars, cursos a distancia, que personas desde México, Guatemala, Chile, Perú, los países de Latinoamérica y las ciudades más distantes que vos te imagines, participan. Entonces ahí tenés una ventaja, no tener que desplazarse para tomar un curso para estar actualizado. Segundo, las personas pueden estar con nosotros de forma sincrónica (online) o pueden verlo cuando tengan tiempo, porque queda grabado”.

Otra de las ventajas, destaca, es que la mayoría de sis actividades educativas son gratuitas, dandole también un valor agregado ante la cantidad de personas que no pueden acceder a pagar un curso o una actividad. “Yo creo que eso son las ventajas más importantes”.

“El profesional médico y todo el equipo de salud en general necesita de lo que nosotros llamamos educación médica continua, por eso hago tanto énfasis en la parte educativa. Es uno de los pilares no solo para los profesionales sino para los pacientes también”.

Flavio Sanchez.
Por último, Sanchez vuelve a reflexionar y poner énfasis en el cambio de paradigma que la pandemia aceleró: “Hace 20 años atrás vos ni te imaginabas que ibas a tener tu portabilidad en tu celular, con tu aplicación, con tu credencial virtual de tu prepaga u obra social, tus estudios, tus laboratorios, tus imágenes… Y en un futuro seguramente tu historia clínica. Vas a ser dueña de tu historia clínica, que será portable y que seguramente vos la lleves a donde vos quieras”.

“Ese es un cambio muy importante, porque es a donde apunta el desarrollo de la tecnología relacionada con la medicina: a lo que se llama paperless. No deberíamos transportar ningún papel, ni la orden médica, ni la receta, ni la imágen, ni el resultado de laboratorio… Todo eso va a desaparecer en un futuro”, vaticina.

“Fijate que muchas cosas, como el desarrollo tecnológico, van por delante de las personas. Un ejemplo es que la ley de telemedicina y la ley de receta digital en argentina tuvieron que ser sancionadas justamente con la pandemia. El desarrollo tecnológico estuvo adelante y hubo que hacerlo”, finaliza.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]

Source
https://www.filo.news/

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