Actualmente, el 49,3% de hombres y el 59,1% de mujeres mayores de 15 años en España tienen alguna enfermedad o problema de salud crónico, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Una realidad que va en aumento con los avances en supervivencia de patologías que hace unos años eran una condena a muerte como la atrofia muscular espinal (AME) o el cáncer. “El número de personas con patologías crónicas aumenta, pero el número de sanitarios no lo hace al mismo ritmo”, señala el Dr. Hans Abdon Eguia Ángeles, miembro del Grupo de Trabajo de Nuevas Tecnologías de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (Semergen), miembro del Danish Group for Digital Healthcare y experto en inteligencia artificial y salud a Consalud.es.
Las nuevas tecnologías “ayudan con la monitorización de los pacientes, por lo que sus patologías –a pesar de ser crónicas– presentarán menos complicaciones”, señala el Dr. Eguia Ángeles
Ante esta situación de mayor demanda, las nuevas tecnologías suponen una importante herramienta para mantener la calidad de vida de los pacientes con cada vez menos recursos. La cronicidad es el campo en el que más se han evidenciado en los últimos años lo beneficios de aplicar las nuevas tecnologías: “Ayudan con la monitorización de los pacientes, por lo que sus patologías –a pesar de ser crónicas– presentarán menos complicaciones lo que repercutirá en una mejor calidad de vida”, explica el Dr. Eguia Ángeles.
AVANCES EN MONITORIZACIÓN…
La telemonitorización es algo que cada vez es más aceptado por los pacientes. Una investigación realizada hace unos años y publicada en el ‘International Journal of Integrated Care’ señala que solo un 4,4% abandonaron el estudio por sobrecarga de trabajo al tener que controlar ellos mismos los valores y las señales de la enfermedad. Desde entonces, además, los equipos se han modernizado e incluido inteligencia artificial (IA).
Dra. Villoslada Muñiz: “Se están llevando a cabo proyectos de investigación en I+D que con alta probabilidad en un futuro podremos ver en la consulta del día a día”
Encontramos pulsioxímetros o tensiómetros con conexión Wifi o Bluetooth, “también existen programas de monitorización en casa como programas que permiten que el paciente pueda colocar su tensión arterial o su glucosa sanguínea, el programa revisará el valor y usando IA dará una respuesta al paciente sobre si su valor es adecuado, es muy alto o muy bajo o si debe contactar a su médico”, detalla el Dr. Eguia Ángeles. Sistemas capaces de recomendar adecuar la dieta para mantener el control de la diabetes o la hipertensión. “Pueden sonar programas muy complicados, pero son algo que ya venimos trabajando desde nuestro grupo de innovación en tecnología digital de SEMERGEN”, añade el experto.
… QUE NO TERMINAN DE LLEGAR
El problema es que actualmente el paciente no tiene acceso a esta innovación. La falta de sistema de monitorización, de formación de los profesionales o porque aún no están instaurados para el día a día hace que actualmente “haya pocos sistemas de monitoreo y seguimiento funcionales en el Sistema Nacional de Salud”, explica la Dra. Raquel L. Villoslada Muñiz, médico de Medicina Familiar y Comunitaria en C.S. Cuenca del Bernesga (León). En el día a día el paciente crónico sigue recibiendo el abordaje tradicional con los dispositivos habituales.
“Se empiezan a involucrar voluntariamente médicos con ayuda de la industria o ingeniería en la monitorización por ejemplo de la glucosa, donde le llega la información del paciente a la aplicación pertinente, pero es algo puntual y voluntario de cada profesional que lo hace”, explica la Dra. Villoslada Muñiz. Son herramientas que no implican equipos costosos y que funcionan en telemedicina y consulta médica presencial. Un presente en otros países, y quizá pronto en España. “Se están llevando a cabo proyectos de investigación en I+D que con alta probabilidad en un futuro podremos ver en la consulta del día a día”, concluye la doctora.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]