La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, lo llama “la medicina del futuro”, pero en la práctica supone un paso más en el desmantelamiento de la sanidad pública en la región. Mientras el caos se apodera de las recién estrenadas Urgencias extrahospitalarias, la mandataria abre un nuevo frente en su gestión apostando públicamente por la atención sanitaria a través de vídeoconsultas, un parche para disimular la falta de médicos en los Puntos de Atención Continuada (PAC).
La ocurrencia fue anunciada por Ayuso en una entrevista en El programa de Ana Rosa este lunes, coincidiendo con la fecha marcada por la Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYTS) para dar pistoletazo de salida a una huelga indefinida de los facultativos. En concreto, reclamaba dotar a los servicios de más equipos tecnológicos para poner en marcha la “telemedicina”.
Al día siguiente, el martes, la jefa de la oposición en la Asamblea de Madrid, Mónica García, cargaba contra el plan de Ayuso. La parlamentaria aparecía en una rueda de prensa equipada con una tablet a través de la que emitió un vídeo. “Estamos viviendo tiempos confusos en los que hay que perder el tiempo para explicar que esta no es una manera de dar una rueda de prensa, del mismo modo que no es una manera de que te atiendan en urgencias”, relataba a través de la pantalla. “Esto es lo que pretende Ayuso que sea una atención en las Urgencias en la Comunidad de Madrid, en vez de un médico, una tablet“.
Tras la crítica, Ayuso insistía en que “la telemedicina es parte del futuro sanitario” y pidió “no denostarla”. Además, en respuesta a Mónica García, la líder del Ejecutivo madrileño insistió en que la propia jefa de la oposición había apoyado la medida en su programa electoral. Unas declaraciones tergiversadas puesto que lo que Más Madrid proponía era utilizar el mecanismo de citas telemáticas en un contexto “apropiado y eficiente para mejorar la salud”. Por ejemplo, para la monitorización domiciliaria de la saturación de oxígeno en pacientes con coronavirus, pero no para las urgencias, como ha señalado en Twitter el también miembro de la formación Javier Padilla.
Así las cosas, el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Enrique Ossorio, insistía en defender la teleasistencia aunque la tildaba de “plan transitorio” que estará en funcionamiento mientras “persista la situación actual”, explicó en referencia a la huelga de los médicos. Sin embargo, afirmó que las vídeoconsultas llegaban para quedarse: “Es un avance y va a existir en la sanidad madrileña”.
Un plan de futuro que tampoco gustó a García, que respondía a Ayuso y su vicepresidente señalando que la telemedicina “es una herramienta al servicio de los profesionales que en ningún caso puede sustituirles”. A su juicio, lo que propone la jefa del Ejecutivo “es que los médicos del centro de Urgencias atiendan a sus pacientes y, a la vez, por videoconferencia, a los de otros centros sin médicos”. “Todo el mundo entiende que esto es una chapuza y además es negligente”, zanjaba García.
En este sentido se han pronunciado también las asociaciones profesionales de médicos a través de una declaración conjunta que firman diez de ellas. En concreto, Reclaman que la vídeoconsulta se use “como herramienta complementaria y en ningún caso sustitutiva de la presencia física del facultativo ya que el contacto directo con el paciente y la exploración física es particularmente importante en situaciones de urgencia”.
Mientras, según confirman a Público sanitarios de los nuevos Puntos de Atención Continuada (PAC), los trabajadores han empezado a recibir, sin previo aviso, protocolos con pautas técnicas de cara a la puesta en marcha de este nuevo sistema. Sin embargo, no tienen constancia de más detalles sobre el plan: ni cuándo echará a andar ni en qué centros se ejecutará.