Telemedicina en medicina de aviación y/o aeroespacial
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la telemedicina como “el suministro de servicios de atención sanitaria en los que la distancia constituye un factor crítico, por profesionales que apelan las tecnologías de la información y comunicaciones con objeto de intercambiar datos para hacer diagnósticos, mejorar e indicar tratamientos y prevenir enfermedades y heridas, así como para la formación permanente de los profesionales de atención de salud y en actividades de investigación y de evaluación, con el fin de mejorar la salud de las personas y de las comunidades en que viven”.
En medicina de aviación y aeroespacial, esta disciplina toma un lugar de extraordinaria importancia dado que permite la transmisión de datos remotos, como son las señales de audio y video. Asimismo, permite que los médicos especialistas estén en contacto entre sí, particularmente con aeronaves en movimiento, como cuando es requerido un apoyo médico en tierra al presentarse un evento médico en el aire y no se cuenta con un médico abordo o cuándo el médico dentro de una aeronave requiere una interconsulta con otro especialista en tierra y de especial interés en las misiones espaciales tripuladas de largo alcance o duración orbital.
La interacción informativa a distancia no es nueva y desde la década de los setenta se enviaron mensajes vía radio mediante dispositivos de telemetría, con datos como trazos electrocardiograficos por personal paramédico a bordo de ambulancias a los hospitales receptores, donde un especialista interpretaba y daba instrucciones. Sin embargo, el advenimiento de la telefonía celular boqueaba o distorsionaba esa naciente tecnología. Hoy en día, la tecnología satelital y las ondas de radiofrecuencia optimizadas han mejorado estas posibilidades.
Un evento médico en vuelo es capaz de generar la desviación de una aeronave y puede llegar a presentarse en uno de cada 500 casos; en algunas ocasiones un médico voluntario a bordo puede dar una atención médica de primer contacto, sin embargo el apoyo de un especialista en tierra puede hacer la diferencia entre la vida y la muerte.
El Capitán José Luis Merino es piloto aviador y médico cirujano oftalmólogo aeronáutico, diplomado en Medicina Aeroespacial. Es presidente del Comité Científico de la Asociación Mexicana de Medicina de Aviación y miembro del Colegio Mexicano de Medicina Aeroespacial y de la Asociación Iberoamericana de Medicina Aeroespacial.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]