Telemedicina
La pandemia causó una explosión en el uso de herramientas de la tecnología digital en muchos sectores, entre ellos los de la salud, conocidos como Telemedicina. De ello quiero platicarles estimados lectores.
Esta semana se llevó a cabo la XXIX Convención Nacional Virtual de la Industria Farmacéutica, con el objetivo de definir y alinear acciones para fortalecer su aportación al Sistema Nacional de Salud, a la investigación y al desarrollo económico del país, ante la nueva e inesperada realidad.
Se habló de la disrupción sanitaria, económica, en cadenas productivas y en tecnologías digitales. En la mesa de discusión del impulso a la telesalud y telemedicina participamos Héctor Valle Mesto, director de Funsalud, un think thank de los más prestigiosos de nuestro país; el Dr. Tomás Barrientos Forte, reconocido educador en salud de la Universidad Anáhuac, y este escribidor.
La disrupción se dio por la pandemia causada por el SARS-CoV y sus consecuencias, entre ellas, las medidas de cuarentena y la reconversión del sistema de salud. En ambas, las TIC’s -Tecnologías de la Información y la Comunicación- han sido fundamentales para la modificada vida social que hoy tenemos
Así hemos visto, que personas que nunca habían utilizado la telefonía celular o el internet fueron sometidas -por la necesidad- a eventos de inmersión y hoy con toda solvencia se comunican por videollamadas o videoconferencias, participan en “webinars” o en las herramientas existentes en la nube digital para trabajar desde su domicilio.
Señalé que en las perspectivas económicas de América Latina para lo que resta del 2020 y del 2021, se ha hecho un llamado a la acción para capitalizar la transformación digital, que puede desempeñar un papel importante en convertir esta crisis sanitaria y económica en una nueva oportunidad de desarrollo enfrentando los retos y desigualdades de nuestro entorno.
Comenté que MeSH (1) es el tesauro de vocabulario controlado por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, que se utiliza para indexar artículos para PubMed (2) y que comprende más de 30 millones de citas de literatura biomédica, revistas de ciencias biológicas y libros en línea, entre otros.
El término Telemedicina fue introducido en 1993 y se refiere a la prestación de servicios de salud a través de telecomunicaciones remotas, incluyendo los servicios interactivos de consulta y diagnóstico. Se incluyen dentro del término otros conceptos utilizados en el argot popular como cibersalud, salud digital, e-salud, telesalud y salud móvil.
Estimado lector, si usted busca en Google el término “Telemedicina” encontrará 9 millones de sitios y si lo busca como “Telemedicine” le saltarán a la vista 22 millones de sitios. En los más de 305 sitios limitados a “México”, en los primeros le invitan a mantenerse actualizado con la más reciente información en salud; realizar consultas a distancia como la nueva modalidad de consultar al médico; las aplicaciones -app- gratuitas o con costo creadas en México o fuera de él para sus dispositivos móviles para cualquier sistema -androide o IOS-; cursos de educación continua o coaching para profesionales y público en general; aplicaciones para ordenadores fijos o móviles y cientos de ofertas más.
La demanda por parte de los ciudadanos es tan alta que los proveedores de servicios a pasos muy por delante de la regulación sanitaria, ofrecen alternativas que miles de usuarios ya utilizan, quedando pendiente el ajuste de la legislación y las normas que derivan de ellas como por ejemplo, del uso de los datos personales en expedientes electrónicos y la interoperabilidad entre los sistemas de salud; la emisión de prescripciones médicas y el surtimiento de ellas por vía electrónica; el presupuesto para equipar con equipos remotos en zonas de alta marginación -energía eléctrica e internet incluidos-, y los recursos humanos para operarlos en ambos lados del sistema.
La Telemedicina llegó para quedarse, con fondos públicos y/o privados, y los legisladores debemos poner al día la legislación que permita expandir su uso minimizando sus riesgos. Yo estoy más que puesto.
(1) https://www.ncbi.nlm.nih.gov/mesh/
(2) https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]