El uso de las Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Tics) ayudará al intercambio y procesamientos de datos en los sistemas de información de la salud y los servicios de e-Salud lo que permitirá una reducción total en costos 40 mil y 100 mil millones de dólares a nivel mundial.
Mediante un estudio de la organización privada en servicios mundiales GS1 y la consultora GS1 McKinsey, mostraron que es necesario estandarizar estandarizar la información de pacientes podría habilitar beneficios sustanciales en su seguridad y permitir una reducción total en los costos de la atención sanitaria.
Además, la integración de datos podrán beneficiar a proveedores y organizaciones del sector de salud, teniendo al paciente en el centro de estas acciones, a través de un código de dos dimensiones que favorece la trazabilidad de medicamentos y la seguridad de los pacientes, tanto en hospitales públicos como privados que vinculado a la tecnología adecuada, da la visibilidad total del comportamiento del medicamento desde su salida del fabricante hasta el apego al tratamiento.
”La estandarización de datos y la interoperabilidad son dos de los principales retos que enfrenta la digitalización de la salud en el país; sin ellos, es imposible una gestión integrada, segura, eficaz y precisa de información relacionada con la atención y el seguimiento de los pacientes mexicanos en las diferentes instituciones de salud, tanto públicas como privadas”, mencionó Osiris López Rojas, gerente de Vinculación del Sector Primario y Salud en GS1 México.
Reveló que esto, tendrá el objetivo de poder conocer la cantidad de centros de salud en el país, atender una consulta mediante la revisión de imágenes digitales, manejar información del paciente por medio de expedientes médicos electrónicos, prescribir, surtir medicamentos a través de la receta médica electrónica, o saber el stock de fármacos e insumos en un hospital, todos estos procesos requieren que existan interoperabilidad de datos en todos los sistemas de las instituciones de salud pública y privada, soportados por procedimientos estandarizados.
Para llevar a cabo este proyecto, la Organización Mundial de la Salud (OMS), mencionó tres brechas que deben tomarse en cuenta como contar con políticas en salud digital para uniformar la tecnología de información sanitaria, así como generar programas nacionales e internacionales sostenibles y garantizar el financiamiento público-privado para su aplicación; y fomentar la participación de los países en el proceso de formulación de estándares para desarrollar sistemas de salud interoperables.
