Reporte Especial HIMSS Chicago 2023: salud conectada y tecnología al servicio de las personas
Analizamos los intercambios en los foros, las ponencias y las presentaciones comerciales, para puntualizar los principales conceptos y tendencias del mayor evento de Salud Digital a nivel mundial.
Por Pablo Pereyra Murray y Rocío Maure
Más de cuarenta mil profesionales del ecosistema de salud, provenientes de ochenta y cinco países, participaron en la Conferencia Anual HIMSS 2023 que tuvo lugar en Chicago del 17 al 21 de Abril. En el evento se abordaron temas centrales para la industria como la implementación de la inteligencia artificial, la ciberseguridad y la interoperabilidad, así como el papel de la tecnología para asegurar la equidad, la perspectiva de los pacientes y el estado del recurso humano de las organizaciones de salud.
Aquí, presentamos un punteo de los temas más destacados y las tendencias que afloraron en la semana más importante del mundo para la Salud Digital:
1-Equidad
La equidad en la atención de la salud fue motivo central durante el evento y los expositores coincidieron en que la tecnología es una gran forma de cerrar la brecha dentro de la población. Sabemos que los determinantes socioeconómicos de la salud están en la raíz de las enfermedades, por eso, la equidad es un principio rector de HIMSS, tal como destacó el CEO, Harold Wolf. El anfitrión del evento destacó la diferencia entre igualdad y equidad, a favor de asegurar las mismas oportunidades para todas las personas en todo el mundo. Durante el evento, se presentó un acuerdo formal entre HIMSS y la Organización Mundial de la Salud (OMS) que rige desde al año pasado y el director general de la división europea de la OMS destacó la importancia de esta cooperación, donde también está involucrada la Organización Panamericana de la Salud (OPS). El objetivo es garantizar la profundización de los estudios, la difusión de capacitaciones, la implementación de evaluaciones para estandarizar procesos e impulsar la tecnología digital en distintas regiones, como Latinoamérica.
Para ilustrar la importancia del concepto, las autoridades sanitarias de la misma ciudad de Chicago dieron a conocer enormes diferencias entre distintos distritos de la misma región en la expectativa de vida al nacer (más de veinte años) y de las tasas de mortalidad infantil. La inequidad en salud es también manifiesta en el acceso a los ensayos clínicos. Un elemento clave para la equidad es el acceso a la atención de las poblaciones carenciadas, la capacidad de agendar consultas concretas tanto virtuales como presenciales.
Un caso de éxito emblemático es el de Parkland Health, ampliamente reconocido por servir comunidades vulnerables en Dallas, Texas. Como punto de partida, miden objetivamente la inequidad y el riesgo potencial; usan intérpretes en la atención virtual; han aprendido a diferenciar perfiles de pacientes para personalizar la interacción; y entienden que la coordinación es fundamental. Durante la conferencia, destacaron la necesidad de que el paciente supere la primera pantalla en la atención virtual, la amplia disponibilidad de un centro de consulta a distancia y el monitoreo remoto. Este grupo aplica ciencia de datos, como analítica predictiva, para intervenir sobre la salud de su población, se enfocan en la atención virtual, la seguridad alimentaria y ambiental, y trabajan con las municipalidades y comunidades locales.
La telemedicina, sobre todo a partir de la pandemia, se convirtió en una gran aliada para facilitar el acceso a la salud. Los límites físicos del hospital ya no son un obstáculo, ahora podemos acercarnos a donde está el paciente que necesita esta atención. Sin embargo, sigue siendo un desafío asegurar la logística que permita derribar esas paredes. El propio hospital no puede encargarse de esa logística, por eso hay que buscar alternativas, como acudir a cadenas logísticas que tenían otros fines originales. En esa línea, cabe destacar la participación de Best Buy Health, una división de la empresa que presentó una forma de lograr esa capilaridad para ofrecer atención primaria en Estados Unidos, desde organizaciones que no se dedican al sector salud.
2- Ciberseguridad
La ciberseguridad ya es una razón de estado y un imperativo estratégico para las instituciones y empresas. Las organizaciones de salud no están exentas y, de hecho, son cada vez un blanco más buscado de estos ataques, por lo que hubo un foro completo dedicado a la ciberseguridad. En ese marco, la conferencia destacada de Nitin Natarajan, Subdirector de CISA (Agencia de Ciberseguridad y Seguridad de la Infraestructura de los EE. UU.) intentó desentrañar la situación actual de la ciberseguridad, las vulnerabilidades del sistema, e hizo un llamado a la cooperación entre la comunidad de salud y el gobierno federal para anticipar, identificar y mitigar los ciberataques. Destacó también la disposición de la agencia gubernamental de Salud y Servicios Humanos (HHO, por sus siglas en inglés) de brindar herramientas para mejorar la ciberseguridad de las organizaciones.
Según el FBI, las instituciones de salud son el primer objetivo para las extorsiones informáticas (ransomware) y la sustracción de información identificada. La pesca (phishing) de datos sensibles a través de correos que generan interacción con trabajadores del sistema de salud es también una amenaza constante, que exige una capacitación y actualización constante del sector humano.
Los propios avances pueden ser usados en nuestra contra, tal como demostraron en el foro sobre el uso de la IA por parte de los atacantes para sortear las defensas en tiempo real. Las instituciones y empresas deben establecer y ejecutar planes estratégicos para prevenir y manejar los ciberataques, garantizar la arquitectura sólida de los sistemas, segmentarlo ante ciberataques y generar back-ups invisibles. Durante estas conferencias, también se destacó la necesidad de compartir datos de salud poblacional desprovistos de identidad y se llamó la atención sobre la información no encriptada proveniente de comunicaciones de dispositivos sensores (wearables), así como sobre la necesidad de establecer estándares y regulaciones.
Por último, y dado que la ciberseguridad es tan pertinente para la transformación digital como muchos otros ejes, HIMSS ofrece una certificación específica para este aspecto y recientemente certificó a la Agencia Nacional de Defensa de los EE. UU.
3- Interoperabilidad
Otro factor fundamental para dar paso a la verdadera transformación digital es la interoperabilidad. Dentro del evento, este eje tuvo relevancia tanto como contenido de paneles como en un foro exclusivo y también en la sección HIMSS Interoperability Showcase, donde agencias gubernamentales, prestadores, organizaciones sin fines de lucro, proveedores, investigadores, consultores y startups presentaron historias y proyectos reales que muestran la implementación de estándares como HL7 FHIR. Esta exhibición ayudó a que los participantes tuvieran contacto con casos de uso reales para intercambiar y utilizar datos en tiempo real con el fin de mejorar la atención, los resultados y el cuidado de la salud.
Por su parte, el panel sobre “Interoperabilidad para disminuir la carga laboral” intentó comprender el avance incuestionable de las historias clínicas electrónicas (HCE), como así también las dificultades emergentes por la saturación de información proveniente de múltiples fuentes y de qué manera la tecnología puede ayudar o complicar su manejo.
Las HCE se están transformando en plataformas fundamentales para la seguridad, calidad de los datos y múltiples aplicaciones. Además de ser indispensable para acceder a todos los datos e intercambiar información entre distintas especialidades, sedes de una organización o incluso regiones, la interoperabilidad con estándares actuales y las plataformas de código abierto entre distintas comunidades de investigadores pueden generar un salto cuántico en las investigaciones clínicas.
Por supuesto que los estándares de interoperabilidad también evolucionan y así lo demostró la nueva coalición público-privada que se lanzó durante HIMSS2023, compuesta por distintos sistemas de salud, organizaciones y entes gubernamentales como la Oficina del Coordinador Nacional de Tecnología de la Información de la Salud de los EE. UU. para facilitar la comprensión e implementación de esta metodología. Con el foco puesto en el uso del estándar HL7 FHIR, la colaboración presentó las ventajas del Bulk FHIR, sobre todo en el uso de datos poblacionales para la toma de decisiones clínicas y el potencial de esta estrategia para mayores innovaciones.
Más allá de las posibilidades técnicas que brindan las nuevas herramientas, la interoperabilidad también requiere asegurar la conexión entre los propios seres humanos, es decir, romper silos de información. Además, no debemos subestimar la inversión de recursos y tiempo que se necesita para implementar sistemas interoperables. En medio de una crisis que azota a muchos países, es esencial plantear objetivos claros y medir la optimización que generará esta metodología. Por ejemplo, durante el evento se demostró que la inversión general en Salud Digital en los EE. UU. es menor a la del año pasado, por lo cual las inversiones de los capitales de riesgo en nuevas empresas digitales son actualmente una fuente vital de financiación, tal como destacó Emily Olsen de HIMSS y MobiHealthNews: «Los nuevos tiempos también exigen nuevas propuestas y estrategias para alcanzar los objetivos deseados».
4- Inteligencia Artificial
Si de innovación e inversión se trata, la inteligencia artificial (IA) fue, sin dudas, la protagonista de la conferencia anual. En el evento, la IA estuvo presente no solo en el contenido de las ponencias, sino también en las propuestas de los stands de la exposición. Cabe destacar que las soluciones presentadas no se limitaron a la parte asistencial, sino que abordan cuestiones administrativas y operativas, muy necesarias para reducir la carga de los profesionales, como se comentó anteriormente.
Varios oradores hicieron la distinción entre el desarrollo y la implementación de una IA. Actualmente, ya hay muchos desarrollos listos, pero el gran desafío es implementar esas herramientas, por ejemplo, integrar las tecnologías de IA con la historia clínica electrónica. Nunca mejor planteado el concepto de ecosistema para referirse a la conexión entre todas las partes. A su vez, el ideal del sector es tener una inteligencia artificial útil, medible, que pueda crear un ambiente seguro. Y ese es el horizonte que se planteó en distintos paneles. La seguridad es, definitivamente, uno de los puntos clave y es necesario establecer el uso responsable para no crear problemas o nuevos riesgos a partir del uso de la IA. En Estados Unidos, hay una coalición de empresas, organizaciones de salud y gobierno para la implementación de la IA que generó una guía de implementación confiable llamada “Blueprint for trustworthy AI implementation guidance and assurance for healthcare”, disponible en formato digital.
En un momento de ebullición de nuevas soluciones y modelos de IA, hay que tener en cuenta que muchos productos no están validados con ensayos clínicos, sino con estudios observacionales. Uno de los problemas que genera este proceso irregular es, por ejemplo, que esos estudios están hechos en poblaciones que no se asemejan a la población latinoamericana. Según afirmó un referente «la validación clínica de los algoritmos de IA es una problemática global, ya que aún no hay un estándar definido».
Durante la conferencia anual HIMSS hubo varias ponencias al respecto y se discutió el papel de estas tecnologías cuando ya están disponibles. Desde una perspectiva cercana, los representantes de la Fundación Cardiovascular de Colombia, institución que completó todo el recorrido para alcanzar la certificación HIMSS 7 el año pasado, explicaron que para usar las herramientas con IA que ya tienen disponibles, es fundamental establecer criterios para el equipo médico, así como abordar las limitaciones jurídicas que surgen. El proceso de digitalización, entonces, implica generar lineamientos y políticas internas para el uso de estas herramientas, además de diseñar estrategias para articularlas al flujo de trabajo diario.
La mayoría de los participantes de HIMSS coincidieron en que una de las conferencias más esperadas fue la de “Inteligencia Artificial Responsable” encabezada por Christopher Ross de la Mayo Clinic. Esta institución ya es referente en este aspecto, dado que están desarrollando una metodología para el uso de IA que busca evitar los sesgos que se pueden generar si se valida el modelo con una sola población y luego se aplica en otra. En ese mismo panel también estuvo presente Kay Firth-Butterfield, CEO del Centre for Trustworthy Technology, que había apoyado la iniciativa de pausar el desarrollo de IA en Salud alegando motivos de equidad, ecuanimidad, irresponsabilidad en las decisiones tomadas y la incertidumbre de los datos compartidos.
Como parte de las ventajas del uso responsable de la IA, durante esta ponencia se destacó la capacidad actual de segmentar e intervenir sobre poblaciones usando modelos predictivos de riesgo, o el uso de IA generativa para la toma y estructuración de notas médicas, considerada una fuente vital de datos del paciente. También se presentaron beneficios concretos vinculados al soporte y asistencia de los participantes del ecosistema, como por ejemplo la utilización de Grandes Modelos de Lenguaje (LLM) para automatizar centros de atención a clientes.
En lo que respecta a ChatGPT, uno de los hitos recientes en relación a la IA, los oradores resaltaron la utilidad en las búsquedas de información médica, pero no en el diagnóstico concreto, el manejo de la enfermedad, la toma de decisiones, ni la codificación de la enfermedad. Por lo pronto, se destacó el valor empático de esta herramienta y el uso actual que pueden darle los pacientes para comprender conceptos difíciles.
Quedó claro que estamos en una etapa muy temprana del uso de la IA en salud y se espera que su desarrollo ocurra de manera progresiva e incremental. Los expositores coincidieron en que aún quedan misterios científicos y problemas éticos por resolver. La comunidad de salud debe definir qué espera de la IA en el futuro, cuándo y cómo usarla, como así también validar la seguridad, eficacia y equidad de los modelos que se implementen.
5- Medicina Predictiva y Preventiva
En la misma línea de los avances con modelos de inteligencia artificial, durante la conferencia se destacó el crecimiento de la informática en enfermería. Los modelos predictivos y la automatización de procesos pueden integrarse en el flujo de trabajo de enfermería con el fin de descargar las exigencias y tareas de documentación, destacó Chad B. Carroll del Comité de Informatización en Enfermería de HIMSS. Asimismo, se mencionaron las capacidades de procesamiento del lenguaje natural (LLM) y la tele-enfermería aplicadas en pacientes internados, con la consecuente reducción de paros cardiorrespiratorios imprevistos y la tasa de caídas de pacientes.
También siguiendo la línea de la IA, las ponencias demostraron que la digitalización permite segmentar poblaciones mediante modelos predictivos de riesgo, basados en inteligencia artificial, que permiten intervenir en forma anticipada antes que aparezcan las complicaciones de las enfermedades crónicas.
En este sentido, son varios los sistemas de salud que empiezan a cambiar su mirada. Tal como el sistema de salud de Israel que, como destacó Ran Balicer, líder de innovación en Clalit, una organización de salud que cubre a más de la mitad de la población de ese país, cambió el paradigma histórico de reactividad ante las enfermedades interviniendo proactivamente para evitar las complicaciones.
6- Tratamientos digitales
Asimismo, combinando realidad virtual con Inteligencia artificial, se está avanzado en la utilización de experiencias inmersivas en el tratamiento del dolor, en la motivación y control del stress de pacientes internados, en la capacitación para realizar ejercicios físicos y en la rehabilitación neurológica. A modo ilustrativo, algunos paneles presentaron el uso de sistemas basados en Alexa de Amazon en las habitaciones, para atender, procesar y direccionar automáticamente las solicitudes de pacientes y familiares internados. También se resaltó el desarrollo de robots que aseguran la cadena de suministro, la provisión de medicamentos para quimioterapia y dispositivos localizadores de personal de salud y equipos médicos en tiempo real, a través del caso de éxito del Samsung Medical Center en Corea del Sur.
7- Personal de salud
Es evidente el déficit y agotamiento creciente del personal de salud en todo el mundo, y ante esta carencia manifiesta, el vector de la atención de la salud debe apuntar hacia la atención virtual, en lo posible fuera del hospital; la automatización de procesos; y la conexión e interacción de los pacientes para que tomen un papel activo en el cuidado de su propia salud, enfatizó la Dra. Anne Snowdon, Directora de Investigación Clínica de HIMSS Analytics.
En la actualidad, disponemos de abundantes medios tecnológicos, pero para escalar esta transformación deben intervenir personas, procesos, políticas y regulaciones. De acuerdo con los distintos paneles del evento, el primer desafío es logístico: mejorar el flujo de los procesos, automatizar los que lo ameriten, y trabajar en conjunto, con los pacientes y sus familias. Se estima que solo el 20 % de la carga de trabajo requiere la opinión o decisión de un experto. Por lo tanto, muchas tareas no esenciales se pueden distribuir fuera de la propia fuerza de trabajo. Como ejemplo concreto de esta ejecución, la Defense Health Agency de los EE. UU. ya promueve para su personal el criterio “primero virtual” para la atención sanitaria, en la búsqueda de una atención más precisa, predecible, preventiva, interactiva y personalizada, tal como comentó su directora, la General Telita Crosland.
Se necesitan herramientas digitales y capacitación que simplifiquen estos procesos para el personal porque, sin dudas, los beneficios justifican el esfuerzo. En el LATAM Summit del HIMSS2023 se brindaron varios ejemplos que justamente demuestran cómo se pueden potenciar las capacidades de los profesionales.
Por su parte, los prestadores de salud que ya manejan un sistema de alta complejidad, deben afrontar la insatisfacción y el bajo compromiso de los pacientes, al manejo creciente de datos de múltiples fuentes y nubes, la desactualización y calidad incierta de los datos, las numerosas regulaciones, además de la obligación de compartir datos con otros actores del ecosistema. Una medida fundamental para mejorar esta situación es disponer de datos precisos y actualizados, y trabajar en conjunto con instituciones con prestaciones virtuales y digitales de alta calidad que reduzcan esa carga.
Está claro que la tecnología no debe representar un obstáculo para los usuarios, sino todo lo contrario.
8- Pacientes
En otra cara de la misma moneda, las organizaciones de salud y los gobiernos detectaron un agotamiento y pérdida de confianza de muchos pacientes, lo que da lugar a una “crisis silenciosa de la Salud Pública”. En respuesta a este fenómeno, hubo una sesión exclusiva dedicada al “Diseño centrado en las personas: Jornada del paciente digital” con oradores destacados en el marco del foro sobre la “Experiencia del paciente”, para colaborar en la solución de esta crisis. Una de las conclusiones fue que la tecnología no debe distanciar al médico del paciente, sino quitarle carga burocrática para dedicarle mayor tiempo y energía a la atención per se.
El concepto del diseño centrado en el paciente tiene sus resonancias cuando el beneficio de los pacientes se contrapone con el beneficio del Sistema de Salud y, como resultado, ya se están consolidando puestos jerárquicos en los prestadores, como los directores de experiencia de consumidores/pacientes (COX).
Cabe destacar que, en muchos casos y a nivel mundial, cambió la mirada que tiene el paciente sobre la organización de salud. En niveles socioeconómicos acomodados, se observó que los pacientes tienden a comportarse como consumidores, buscando replicar su experiencia como tales en ámbitos de la vida cotidiana. Es frecuente escuchar a los desarrolladores y prestadores referirse a ellos en términos de clientes, consumidores, incluso ciudadanos. Por lo tanto, esas expectativas exigen nuevas soluciones y un mayor acceso a la información.
Una recomendación que se brindó a los desarrolladores es tener en cuenta que las personas en general se desorientan en la lectura de su propia historia clínica, por lo que se prefieren resúmenes y actualizaciones expresados en su lenguaje natural. Por ejemplo, se presentaron aplicaciones que permiten al paciente y familiares conectarse con el equipo de salud y al equipo entre sí, utilizando procesamiento de lenguaje natural (PLN) y grandes modelos de lenguaje (LLM), que ordenan los acontecimientos en una línea de tiempo, estructuran las notas y conversaciones y las traducen a un lenguaje no técnico.
9- Salud Mental
Otro punto crítico fue el cuidado de la salud mental, que se está consolidando como un eje de la salud digital. Varios paneles destacaron la alta prevalencia de estos trastornos y las enormes dificultades para asegurar el acceso a su atención, en particular por las comunidades más vulnerables. De hecho, hubo un panel exclusivo llamado “La tecnología y la innovación, ¿pueden generar avances en la salud mental?”, que abarcó las numerosísimas soluciones digitales recientes, que contemplan el acceso y el seguimiento de pacientes, en el contexto de la carencia de regulaciones e insuficiente evidencia de su efectividad.
10- Certificaciones
Por último, cabe destacar que el abanico de certificaciones de HIMSS en diferentes aspectos de la salud digital. En el marco del evento, se presentó un nuevo modelo de maduración para servicios ambulatorios, con una visión más amplia. El nombre del nuevo modelo es “C-COMM” (Community Care Outcomes Maturity Model), y tiene como objetivo evaluar la madurez y capacidades de sistemas de salud digital de atención sin urgencia de pacientes con enfermedades crónicas, fuera del contexto hospitalario, destinado a proveedores de atención primaria, telesalud e instituciones especializadas en salud materno-infantil o salud mental.
Esta nueva perspectiva de evaluación jerarquiza el bienestar del paciente y su familia, para ponderar si la transformación digital está impactando de forma positiva o no en el aspecto asistencial, operativa, cuáles son los resultados financieros.
Porque, claramente, el principal eje de todo el evento fue el paciente y todos los avances deben siempre tenerlo como prioridad.[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]